La abogada de Moussa O., de 23 años, sospechoso de haber matado a puñaladas a Jack Koker (55), cree que la justicia apunta demasiado alto en el caso contra su cliente griego. El lunes se pidieron dieciséis años de cárcel contra Moussa.
El joven de 20 años nacido en Atenas apuñaló mortalmente a Jack Koker el 30 de mayo de 2017 en su casa de Koningsplein, en Maastricht.
Bastante alto
La abogada Sjanneke de Crom se muestra comprensiva con la demanda, pero su posición en el caso es muy diferente a la del fiscal. "Si se fijan en las conclusiones que saca el fiscal del caso, entiendo la demanda. Sólo que si se fija en lo que aporta mi cliente... Él dice que tuvo que defenderse aquel día. Entonces una demanda de 16 años es bastante alta".
No hay elección
De Crom sostiene que Moussa simplemente no tenía otra opción. "No tenía otra opción, hizo lo primero y mejor que tenía disponible ese día. Ese cuchillo. Y apuñaló con eso, para escapar de esa casa", concluye el consejero.
Comprar cocaína
La justicia supone que Koker fue apuñalado después de que un asunto de drogas se le fuera de las manos. De hecho, los interrogatorios revelaron que Moussa y su novia estaban en casa de Koker para comprar cocaína. El fiscal cree que Moussa simplemente no quiso o no pudo pagar. Sin embargo, el propio principal sospechoso afirma que estaba en la residencia para robar algo a Koker, tras lo cual la víctima posterior le atacó.