La Fiscalía pide hasta cinco años de cárcel contra tres sospechosos que querían viajar a Siria para unirse al ISIS. Son holandeses de ascendencia afgana, iraquí y kurda.
Seyed H., de 27 años, fue condenado a cinco años de prisión. La fiscalía pidió dos años y medio y un año contra los otros dos sospechosos.
"Participaron en la preparación de un delito de terrorismo y en la financiación del terrorismo", afirma el fiscal en su escrito de acusación. Dos sospechosos admiten que querían viajar a Siria, pero dan una razón inocente.
Hari N. dice que quería ir a ayudar a los huérfanos. Seyed H. había pasado antes una semana en Siria y quería montar una empresa de transporte de frutas y verduras. "Pero no hay nada en absoluto en el expediente penal sobre una patata o un huérfano", dijo el funcionario.
Conversaciones por chat
Los sospechosos fueron objeto de un seguimiento intensivo por parte de agentes antiterroristas, según muestra el expediente. Se intervinieron sus teléfonos, se recuperaron muchas conversaciones de Skype y de chats de WhatsApp en sus teléfonos y ordenadores portátiles, y en un coche que conducían se instalaron escuchas telefónicas.
Todas las conversaciones versaban sobre el viaje a Siria y lo que debían llevar consigo para unirse a la lucha armada, según la acusación. "Te veré en el campo de batalla", dijo un contacto en Siria durante un chat. De esto, la fiscalía concluye que el sospechoso quería ir a Kobani, donde el IS estaba luchando contra los kurdos.
Según la Fiscalía, los tres también financiaron el terrorismo transfiriendo dinero a combatientes activos de la yihad en Siria. Se trataba de 1.000 euros y posteriormente de cantidades menores. "Permitía a los yihadistas comprar munición adicional o un arma", dijo el agente.
Nada que ver con el IS
En la vista de ayer, los tres sospechosos ya se distanciaron del EI. "No tengo nada que ver con el EI y desde luego no quería acabar en el califato", declaró Seyed H. Insiste en que quería marcharse por una razón inocente.
Hardi N., descrito por la fiscalía como ex mujeriego y bebedor de alcohol, dijo que quería ir a Siria para "vivir pacíficamente" según el islam puro. También él se distanció del EI.
El juez dictará sentencia en quince días.