El hombre de Heerlen asesinado el domingo por la tarde en su ciudad natal parece haber sido apuñalado hasta la muerte con un cuchillo de pelar por su primo. Así lo confirman fuentes de la investigación.

Roland K., de 23 años, natural de Heerlen y de origen húngaro, está detenido como sospechoso de asesinato. El apuñalamiento mortal tuvo lugar en el domicilio de la víctima, Robert Degens (38), en la calle Bredastraat de Heerlen.

Degens y K., enfrentados por problemas familiares, discutieron por un billete de diez, según fuentes internas. Roland K. cogió un pelador que llevaba encima y apuñaló a su primo.

Los servicios de emergencia reanimaron al hombre sangrante en el patio trasero de su casa. Sin embargo, fue en vano. Los vecinos hablaron de "un espectáculo de sangre al que nadie podría sobrevivir". El fugitivo Roland K. se entregó a la policía poco después del asesinato. Ayer fue interrogado varias veces por la policía judicial de Heerlen, pero hasta ahora se ha acogido a su derecho a guardar silencio.

Françoise Landerloo y Serge Weening, abogados del acusado de Heerlen, hablan de "un caso muy triste en una misma familia. El cliente nos ha dicho al menos cien veces: 'Yo no quería esto así'. Está completamente fuera del mapa".

Según él, primero fue atacado y recibió unos fuertes golpes en los brazos, tras lo cual actuó en defensa propia."

Los acusados en este caso están asistidos por: