BREDA - Un rumano fue condenado el lunes por la tarde en Breda a tres años de prisión por fraude con tarjetas de débito. Se le acusa de pertenecer a una banda que sustrae tarjetas de débito manipulando las cajas registradoras de los supermercados. Con las tarjetas de débito falsificadas se vaciaron cuentas de víctimas de Tailandia y Rumanía. El sospechoso fue sorprendido in fraganti en julio en el Albert Heijn del centro comercial Heksenwiel de Breda, donde se había encerrado y montado el equipo de skimming en la caja registradora durante la noche.
El hombre, de 36 años, niega tener nada que ver con el robo en otros supermercados de Breda, Veenendaal y Amstelveen.