Imagine a su cónyuge enzarzado en una pelea, viendo cómo alguien le asesta un golpe mortal. Pronto llega la policía a la puerta. Los agentes quieren saber de usted, como testigo, qué ocurrió. Menudo dilema. ¿Debe decir la verdad? ¿Debe inventarse una historia? ¿Puede retractarse más tarde de la declaración hecha una vez? Presa del pánico, cuenta a la policía todo lo que ocurrió ante sus ojos, lo que lleva a su marido a la cárcel durante mucho tiempo.

Por ley, un testigo no puede ser obligado por la policía a declarar. En los tribunales, en cambio, hay que decir la verdad. Esto significa no sólo que un testigo puede ser obligado a declarar, sino también que es punible si, bajo juramento, miente.

Sin embargo, la obligación de testificar no se aplica a todo el mundo. Por ejemplo, los familiares directos de un sospechoso no están obligados a testificar. El legislador concede, en algunos casos, más valor al mantenimiento de ciertas relaciones familiares que al establecimiento de la verdad.

El derecho a no declarar contra un miembro de la familia, por ejemplo, se denomina en la ley "derecho al privilegio". Así, gracias a este derecho al privilegio, una esposa no tiene que declarar contra su marido y una madre no tiene que declarar sobre uno de sus hijos.

Pero, ¿qué puede hacer una persona con derecho al privilegio si, de todos modos, ha hecho una declaración a la policía? A menudo oigo a clientes decir que "entonces se retractan de la declaración de todos modos". Después de todo, no estaban bajo juramento. Sin embargo, ¡eso no es posible!

Un testigo puede hacer una nueva declaración ante el tribunal, pero esto no elimina una declaración anterior. Todas las declaraciones realizadas siguen formando parte del expediente del caso. Y corresponde al juez juzgar la fiabilidad de todas las declaraciones de ese expediente.

Por lo tanto, mi consejo es:

Tenga en cuenta que no siempre está obligado a declarar. En el caso de un familiar sospechoso, puede invocar su derecho al secreto profesional. Si desea testificar, tenga en cuenta que una vez que ha hecho una declaración, no puede retractarse. Consulte siempre a su abogado antes de hacer una declaración. Él podrá asesorarle sobre sus derechos y obligaciones.