EINDHOVEN - El departamento de investigación criminal de Brabant Zuid-Oost ha nombrado a H. A., de 31 años y natural de Waalre (Brabante), principal sospechoso de una investigación a gran escala sobre la captación y violación de chicas polacas, a las que se obliga a trabajar como prostitutas en nuestro país. El hombre está entre rejas. Así consta en el expediente policial ahora filtrado, al que ha tenido acceso De Telegraaf.
Las prácticas delictivas dirigidas por A. tuvieron lugar presuntamente con frecuencia en Ámsterdam, Venlo, Eindhoven y Maasbracht en los últimos años. El caso salió a la luz cuando una mujer polaca de 22 años lo denunció a la policía. La mujer identificó al cabecilla H. A., al que llama su "loverboy" en los documentos policiales filtrados, como el cerebro detrás, entre otras cosas, de la brutal explotación.
La ciudadana polaca en situación irregular se encontró con A. en un café de Valkenswaard, tras lo cual se fue enredando cada vez más en la red de su amante. Esto supuso, entre otras cosas, que la mujer se viera obligada a trabajar como prostituta en el Barrio Rojo de Ámsterdam. Además, declaró que fue brutalmente violada por uno de los cómplices de A. en un piso de Eindhoven.
H. A. es actualmente sospechoso oficial de trata de seres humanos y blanqueo de fondos procedentes de actividades delictivas, entre otras cosas. Según el abogado penalista de Maastricht Serge Weening, su cliente mantuvo una relación amorosa con la declarante. "Las acusaciones contra él se derivan del resentimiento tras la ruptura de la relación", dijo.
