La menor de Echt que estuvo al volante en un accidente mortal en su ciudad natal en 2018 ha sido condenada a 180 horas de servicios comunitarios por el tribunal de Roermond.
Tampoco se le permitirá conducir un vehículo a motor durante un año.
Exonerado
Su hermano, ahora de 31 años, que también iba en el coche, fue absuelto por el tribunal. Según el tribunal, esa noche le hizo saber a su hermana una y otra vez que no quería que condujera su coche. El hombre, que padece una discapacidad mental, hizo todo lo que estuvo en su mano para disuadir a su hermana de que condujera de todos modos, según el tribunal.
Descuidado
El juez consideró que la conductora, ahora de 17 años, se había comportado con bastante imprudencia. Conducía a velocidad excesiva por una carretera estrecha y sinuosa con árboles en el arcén, mientras llovía y además no tenía edad suficiente para conducir un coche.
Accidente
Ese 10 de marzo de 2018 en concreto, perdió el control del coche en una curva y chocó contra un árbol. En el siniestro murió una niña de 15 años de Maasbracht. Estaba sentada en la parte trasera del coche. Una niña de 14 años resultó gravemente herida. Sufrió importantes daños cerebrales a causa del accidente, con secuelas permanentes.
Tras el accidente, el hermano afirmó que él iba al volante. Pero las imágenes tomadas con un teléfono móvil por uno de los ocupantes mostraron que su hermana conducía el coche.
Requisitos
Contra la chica, el fiscal había exigido 180 horas de servicios a la comunidad, seis semanas de prisión suspendida y dos años de privación del derecho a conducir. Contra su hermano, la demanda era de 150 horas de servicios a la comunidad, dos meses de prisión en suspenso y dos años de inhabilitación para conducir.
