Adolf P., de Geleen, dirige un fondo de ayuda a la población romaní. También ayudó a su cuñado de la República Checa, pero éste quería dinero y amenazó a Adolf, dice su abogado. Adolf quiso asustar a su cuñado con su coche y le atropelló. Tentativa de homicidio, según la justicia.
Adolf dirige una fundación para gitanos necesitados en Holanda. Les proporciona alojamiento, trabajo y educación. Para ello, recibe una subvención del Estado. "Pero de vez en cuando me piden dinero. No puedo dárselo. Entonces se enfadan y empiezan a amenazarme. Me amenazan por mi propia bondad", dijo ayer en el tribunal de Maastricht este hombre de 39 años de Geleen.
Amenaza
Al parecer, fue amenazado varias veces por el hermano de su mujer, un romaní checo al que Adolf había conseguido trabajo en McDonald's y alojamiento. El checo también le exigió dinero porque pensaba que Adolf tenía suficiente con su fundación gitana, argumenta su abogada Sjanneke de Crom.
Asustar
El hombre de Geleen estaba harto de amenazas. "Quería asustarle, pero no pegarle", dijo Adolf. Pero eso es exactamente lo que ocurrió cuando el checo paseaba por Jos Klijnenlaan con el primo de Adolf la noche del 23 de mayo. Con su todoterreno Mercedes, arrolló a la víctima, que cayó sobre el capó y sufrió fuertes contusiones.
Tentativa de homicidio
Tentativa de homicidio, opina la fiscalía, que pide 18 meses de cárcel, seis de ellos en suspenso. De Crom cree que es demasiado severo, ya que Adolf actuó movido por el pánico y la impotencia y condujo con demasiada calma para una colisión mortal. "No hubo ninguna cuestión de intencionalidad". Pide además al tribunal que tenga en cuenta los importantes proyectos de Adolf para los romaníes, que se estancan sin él. El tribunal dictará sentencia dentro de quince días. La víctima ha regresado a la República Checa.
